Nuestra carta relojera a Santa Claus

Este año, en LOFT nos adelantamos a escribir nuestra lista de deseos para Papá Noel. ¿Por qué? Porque todos sabemos que los relojes son el regalo perfecto, especialmente cuando vienen del mismísimo Santa. Aquí van nuestras peticiones según cómo nos portamos este año: desde relojes para el modelo a seguir, hasta los premios de consuelo para los que “lo intentaron”.

Diciembre 24, 2024
Fernando Aldea

Si nos portamos muy bien

Querido Viejito Pascuero o, como dice Latinoamérica toda, Papá Noel, hemos sido un ejemplo de comportamiento este año. Por eso, nuestros deseos no son para nada modestos. Primero, el Christopher Ward Bel Canto, elegido por este humilde servidor. Este reloj es una obra maestra que democratizó la sonería en la alta relojería. Su diseño permite ver el mecanismo que produce el sonido, y con cada hora, este reloj suena con el estilo de una creación de la Santísima Trinidad relojera. Con un precio más que razonable para lo que ofrece, Santa, creemos que está a tu alcance.

Además, el Bel Canto cuenta con un movimiento automático Sellita SW200, modificado para incluir el módulo de sonería visible en la parte frontal. La caja de titanio lo hace liviano y resistente, mientras que su esfera abierta revela detalles mecánicos que enamoran. Es un reloj que combina innovación y tradición, ideal para quienes sueñan con algo fuera de lo común.

Daniel, por otro lado, desea con toda su alma el Toledano & Chan, una joya brutalista y asimétrica que rescata la estética de los relojes arquitectónicos de los años 70. Este modelo, con su diseño único y su carácter distintivo, es el epítome del gusto refinado y out of the box. Es raro y difícil de conseguir, pero estamos seguros de que si tú no puedes, nadie más podrá.

El Toledano & Chan es inconfundible. Su diseño geométrico y su caja de acero inoxidable de inspiración arquitectónica son perfectos. Sus líneas limpias y esfera asimétrica rompen con los aburridos moldes tradicionales, creando un reloj que es tanto una pieza de arte como una herramienta funcional. Es un reloj para quienes no temen sobresalir, nunca.

Si nos portamos más o menos

Sabemos que no estuvimos a la altura todo el año, pero hicimos nuestro mejor esfuerzo. Para esos días “intermedios”, yo elijo el Lorca Model No. 2. Este precioso cronógrafo retro es un guiño al diseño vintage con su esfera panda invertida, caja compacta y brazalete tipo “granos de arroz”. Es accesible, elegante y tiene un aire nostálgico que lo hace irresistible.

El Lorca Model No. 2 está impulsado por un movimiento meca-cuarzo VK64, que combina precisión y practicidad con una estética Mad Men. Su caja de 38 mm es perfecta para quienes buscamos un tamaño clásico, mientras que su cristal de zafiro abombado añade el magistral toque final. Es un reloj equilibrado, ideal para quienes valoran los pequeños detalles.

Daniel opta por algo cercano a su corazón de buzo: el Doxa Sub 200T Sharkhunter, el diver perfecto para el verano del hemisferio sur. Su diseño más compacto y liviano en comparación con otros modelos de la marca lo hace ideal para quienes quieren lo mejor de Doxa, pero en formato acotado. Su esfera negra y su brazalete icónico lo convierten en un clásico instantáneo. Papá Noel, este reloj grita aventura y verano, perfecto para una Navidad calurosa y llena de sol.

El Doxa Sub 200T Sharkhunter cuenta con un bisel unidireccional de cerámica, una resistencia al agua de 200 metros y un movimiento automático suizo confiable. Su caja de 42 mm y esfera con índices luminiscentes aseguran legibilidad en cualquier situación. Es un reloj de buceo que combina estética retro pero con las prestaciones modernas que los fanátícos siempre estamos buscando.

Si nos portamos mal

Ok, Papá Noel, sabemos que este año no fuimos un modelo de virtud, pero aún queremos algo bajo el árbol. En esta condicion, yo elijo el Timex 1983 E-Line Reissue con esfera plateada, un reloj que canaliza todo el encanto retro de los años 80. Su caja integrada y diseño limpio lo convierten en un clásico que nunca va a pasar de moda.

El Timex 1983 E-Line Reissue tiene una caja de acero inoxidable con acabado cepillado y una esfera plata minimalista con índices aplicados. Su movimiento de cuarzo lo hace súper confiable y accesible, mientras que su brazalete integrado asegura que sea cómodo de llevar. Es el reloj perfecto para los que adoramos un look vintage, pero sin comprometer la funcionalidad.

Daniel, como siempre más osado, opta por el Casio Casiotron TRN-50, un modelo vintage que captura la esencia de los relojes digitales de otra época. Con su funcionalidad práctica y diseño peculiar, este Casio es un homenaje a los inicios de la relojería digital. Puede que no sea lujoso, pero tiene todo el carácter que un buen reloj necesita.

El Casio Casiotron TRN-50 ofrece un diseño cuadrado con una pantalla digital que muestra la hora, fecha y funciones adicionales. Su construcción ultra ligera de resina y su durabilidad lo hacen ideal para el uso diario y los “tortazos” propios de la agitada vida moderna. Es un reloj que apela a la nostalgia de los años 80, un artilugio genial para quienes aprecian los diseños originales y prácticos.

Conclusión

Así que, querido Viejito Pascuero, aquí tienes nuestras tres opciones según cómo nos portamos este año. Porque si algo aprendimos en LOFT, es que no importa el comportamiento, siempre hay un reloj perfecto esperando ser usado. Y recuerda: la Navidad siempre es mejor con relojes.