Consejos para un novel coleccionista de relojes

Disfruta la investigación y la caza del modelo deseado, y enfoca tu presupuesto en las piezas realmente significativas para evitar distracciones y alcanzar tu objetivo final con éxito.

Abril 7, 2024
Daniel Pinto

Si llegaste a LOFT, seguramente ya es demasiado tarde para ti. Ya viviste las batallas, sufriste las decepciones y pisaste las trampas que todo coleccionista curtido atraviesa durante su eterno caminar por este bello, pero a veces cruel, hobby. Sin importar la época cuando empezaste, ni el tamaño de tu arsenal actual, todos cometimos errores en el camino, y esos errores de seguro te pesan hasta el día de hoy.

Ese reloj vintage que dejaste pasar y que ahora es un ícono, aquel vendedor que te vendió un engendro con sobreprecio, o la aplastante decepción de finalmente recibir el paquete en el correo y no sentir nada cuando finalmente lo pruebas en tu muñeca. En fin, aquí estamos para viajar en el tiempo, volver a nuestra infancia coleccionista, y darnos los consejos que nos hubiera servido recibir cuando empezábamos recién a descubrir este mundo. Consejos que pueden parecer obvios, pero que incluso aquellos que llevamos muchos años en el juego seguimos olvidando, o más bien eligiendo ignorar, con nefastas consecuencias.

Ya sea que estás empezando y buscas dirección entre tanto estímulo, o simplemente quieres refuerzo positivo para tu próxima adquisición, estos son los 6 consejos que nos daríamos a nosotros mismos antes de empezar nuestra colección:

1. El viaje es mejor que el destino

Gran parte de la satisfacción obtenida de un reloj viene en la etapa de la investigación, la “cacería”, así que no te apures, disfrútala. Una vez que compras, ya está, no hay más. En cambio, la etapa de descubrimiento, el entrar en las profundidades oscuras de un modelo y averiguar todo lo que hay que saber, bueno y malo, es lo que realmente cementan tu vínculo con el reloj. Hoy, con Internet, puedes pasar meses, incluso años, transformándote en un erudito de una referencia en particular. Ese viaje de descubrimiento es maravilloso, ya sea que compres o no, y te permitirá realmente apreciar los detalles y el alma de tu próximo reloj.

2. Gana las grandes guerras y olvida las pequeñas batallas

Muchas veces, en nuestro camino hacia esa pieza soñada, se atraviesan nuevos relojes, compras impulsivas y generalmente de bajo valor, que nos tientan y distraen del objetivo final. Nuestro consejo es que no escuches ese canto de sirena, manten la mente en la gran meta, y evita diluir tu presupuesto en piezas que finalmente no lograrán rascar esa picazón que solo un “grial” puede sanar.

3. Paga la mejor condición que tu presupuesto aguante

Este punto es difícil de ver al comienzo. Uno ahorra y ahorra para poder llegar apenas al umbral de presupuesto del reloj soñado. El problema es que en esa parte del umbral te encuentras con ejemplares mal pulidos, con piezas faltantes, de dudosa procedencia, etc. Luego, cuando empiezas a divisar tu flamante nuevo reloj en las muñecas de otros coleccionistas, te das cuentas que los de ellos están en condición perfecta, haciendo que el tuyo se vea inferior, y le pierdas ese amor inicial. Por eso, nuestro consejo es que siempre compres en la parte alta del umbral de presupuesto para un cierto modelo. Si es necesario espera para juntar más, espera. Si es necesario comprar un modelo de menor valor, pero en excelente condición, te aconsejamos hacerlo. Es mejor tener el mejor ejemplar de un modelo “inferior” a tener un Frankenstein del reloj “superior”. Nada alimenta más tu amor de largo plazo con un reloj que poder disfrutar de un reloj sano y orgulloso entre sus pares.

4. Las modas son para niños

Tú eres una persona de mundo. Trabajaste duro y ahorraste para comprar un reloj especial. Uno que celebre tu individualidad, que diga algo sincero de ti, y que siga vigente para ti en 20, 30 ó 100 años cuando tus nietos lo hereden. Es por esto que te aconsejamos apagar tus redes sociales antes de comprar. El algoritmo nos bombardea de lo que cree queremos ver, perpetuando un loop interminable de Daytonas, Royal Oaks y Nautilus. No tenemos nada en contra de estos íconos, pero al momento de elegir tu reloj, asegúrate de que el ícono seas tú y lo que elijas tengas que justificártelo solo a ti. Los clásicos con clásicos por buenas razones, pero sólo tú puedes hacer que un reloj se vuelva legendario en tu vida, así que elige con el corazón y no con el ego. Si al final de todas maneras te arrepientes, relájate, es sólo un reloj.

5. Conoce al resto de la tribu

La mayor alegría de este hobby viene de las personas detrás de las muñecas que vemos en fotos. Una sala llena de coleccionistas es una sala llena de personas interesantes, que aprecian la artesanía, ingeniería, diseño, y la historia. Es aquí donde podrás conocer a alguien al que si le interesen tus fotos de tu colección. Aquí aprenderás los secretos para comprar piezas imposibles de conseguir. Aquí llegarás por los relojes, pero te quedarás por las mejores conversaciones de tu vida. Esperamos verte en nuestro próximo evento.

6. Dilata el placer

Nunca, pero nunca, compres de manera impulsiva. Ni siquiera un par de calcetines, pero especialmente un reloj. Sabemos lo difícil que es resistir ese impulso cuando pasas por la boutique y llegó esa novedad que esperabas, o cuando un amigo te ofrece algo que parece irresistible. Deja siempre 48 horas de enfriamiento para meditar la compra. ¿Está dentro de tu presupuesto? ¿Cómo afecta mis planes para las otras piezas que tenía en mente? ¿Es algo que realmente quiero o es el temor a perder una oportunidad? Recuerda que SIEMPRE habrá más relojes y que un impulso mal controlado te puede meter en problemas con tus objetivos relojeros o incluso en tu futuro personal. Respira, disfruta lo que hoy tienes, y luego toma esa decisión.